Ejercicio n.º 47

LOLITA.-Pues yo no he oído nada.
JULIA.-Como que con las narices chafadas en un almohadón no hay quien oiga. (En la calle se oye gritar <<¡Julia!>> nuevamente.) No llaman, ¿verdad?
LOLITA.-Será la señorita.
JULIA.-No. La señorita no es.
LOLITA.-A que sí que es la señorita, ¿vamos? (Abren el ventanal y se asoman.)
JULIA.-(Dirigiéndose a los que se supone que están en la calle.) ¡Ahora baja la chica, señorita Flora! (Cerrando el ventanal.) ¿Te convences de que yo sé lo que digo, visión?

(Enrique Jardiel Poncela:Margarita, Armando y su padre)